Mesa dieciochera ofrece más que empanadas y choripán

Expertos llaman a rescatar la diversidad de la gastronomía chilena y proponen adaptar recetas tradicionales para disfrutar las Fiestas Patrias de manera equilibrada.

La mesa de Fiestas Patrias no tiene por qué limitarse a empanadas y embutidos. La gastronomía chilena es amplia y variada, y ofrece alternativas igualmente tradicionales que permiten celebrar con identidad y, al mismo tiempo, de forma equilibrada.

Así lo señala María Cristina Escobar, directora de Nutrición y Dietética de la Universidad Andrés Bello en Concepción, quien recuerda que “tenemos una diversidad increíble de platos, desde los guisos de quinoa del norte hasta las papas nativas, el calafate y el merkén del sur”. A su juicio, el equilibrio no está en privarse, sino en elegir con conocimiento y adaptando cada preparación a las necesidades de quienes celebran.

Escobar destaca que dentro de la tradición gastronómica chilena existen opciones balanceadas que forman parte de la cultura nacional, como el charquicán, las legumbres con mote, las cazuelas o el tomate a la chilena. También subraya el valor de acompañamientos saludables como el pebre, que puede reemplazar salsas altas en calorías.

La académica recuerda que la cocina chilena se ha construido a partir del encuentro de tres herencias: la indígena, que aportó productos esenciales como el maíz, la papa, el poroto y el ají; la española, que sumó técnicas culinarias durante la época colonial; y la europea de los siglos XIX y XX, con fuerte influencia francesa, que refinó las preparaciones locales.

En ese sentido, Escobar plantea que las Fiestas Patrias son una oportunidad para compartir y transmitir saberes culinarios, así como para redescubrir platos tradicionales en casa. “Podemos prepararlos de manera más saludable, con menos sal y menos grasas, como un acto de cuidado hacia nosotros mismos y hacia nuestra tradición”, concluye.